¿Cambiará los Resultados de las Elecciones el Debate Presidencial de Enero?

Netorivas

El 12 de enero tendrá lugar el primer y único debate presidencial, como deben ser los debates presidenciales, que es organizado por la Asociación Salvadoreña de Radiodifusores (ASDER) y que será moderado por Armando Guzmán, periodista mexicano de larga trayectoria a nivel internacional.

Armando Guzmán fue el corresponsal principal de Univisión en Washington, DC primero y después de TV Azteca y Azteca América en México. Pero nunca ha moderado un debate como el que proyecta ASDER. Veremos cómo le va.

El debate, que tendrá lugar a escazas tres semanas antes de las elecciones, enfrentaría a los candidatos presidenciales, más que a sus partidos, lo que podría beneficiar a Elías Antonio Saca, quien lleva una clara ventaja, como orador, a los demás candidatos.

Es improbable, sin embargo, que a tres semanas de las elecciones las cosas cambien tan radicalmente que después de ser un distante tercero en las preferencias ciudadanas, Saca recupere el espacio perdido y amenace seriamente a ARENA y que lo desplace en el segundo lugar que hoy ocupa.

Esto significa que Norman Quijano tiene que poner su mejor cara e intelecto para desafiar la astucia de Saca y evitar que después del debate la gente diga que su participación fue más perjudicial que beneficiosa para su candidatura.

A Salvador Sánchez Cerén lo que más le conviene es no hablar mucho fuera de lo que él domina que es poco.

Los otros dos candidatos no debería participar, porque no tienen ninguna probabilidad de afectar los resultados y su presencia lo único que haría es quitar precioso tiempo para oír las posturas de los tres principales candidatos.

En cuanto al moderador, traer a un extranjero lo único que garantiza es neutralidad, pero su falta de conocimiento del ambiente político nacional y su falta experiencia podrían resultar en un detrimento de la fluidez que se espera del debate. Yo hubiera preferido a Jorge Ramos de Univisión o Carlos Montero de CNN, o, mejor todavía, al padre Chema Tojeira, Sandra de Barraza o Roberto Rubio.