Netorivas
Nadie, fuera del grupito que lo maneja, sabe, realmente, lo que ocurre en el puerto Corsaín. El puerto está cerrado. Eso es, está cerrado durante el día, pero por la noche como que hay actividad de embarcaciones recalando en el puerto, no se sabe qué clase de mercancías descargan o cargan.
El gerente del puerto, Jaime Elías fue despedido. Una licitación para la construcción de un dique seco fue misteriosamente declarada desierta, porque las autoridades de Corsaín querían adjudicarla a una empresa guatemalteca, con relaciones próximas a intereses salvadoreños. Pero intervino otra compañía salvadoreña con una mejor oferta y la licitación se declaró desierta.
Parece que INE –la subsidiaria de CEL—contribuye a sufragar los gastos de Corsaín.
El ruso Vitali Logvin, influye desde su residencia en México en lo que ocurre en el puerto, a través del gerente general de Corsaín, el mexicano con documentación salvadoreña Carlos Danilo Cabrera.
Algo grande, muy grande, está sucediendo y Corsaín no está solo.
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