ATARDECERES DE OTOÑO
Viendo las hojas caer
plácidamente extasiado
en una otoñal sinfonía
de impresionante y pictórica mezcla
de amarillentos y áureos colores
con el rojianaranjado profundo
de un espléndido atardecer…
la naturaleza nos hace entender
con artístico y colorido lenguaje
que este es un adiós sin ambages
a un sofocante verano
que nos hizo escalar y casi llegar
a la cima de la inanición.
Con la impetuosa caída de las hojas
nos envuelve ahora poco a poco
la agradable frescura del otoño
recordándonos con natural actitud
que el año también está en su otoñal atardecer
pero que antes que llegue a su final
blanquísimos copos de nieve podremos ver
con la primera tormenta invernal.
Sin importar los motivos ni auscultar los por qué…
para quienes cruzamos el río de la vida
por la parte norte de América
el otoño es como el puente
que nos permite transitar libremente
por las gélidas temperaturas de fin de año
donde nuestros sueños y desvelos se congelan
y tiritando con inusitado entusiasmo
nos preparamos para recibir
con espectaculares y despampanantes luces
un año nuevo que nos contagia de alegría
de buenos propósitos y esperanzas nuevas
haciéndonos compartir e idealizar
un nuevo año lleno de fraternidad y solidaridad.
Fundidos entonces en un abrazo
en una emotiva despedida de año
nos atrevemos ilusamente a pensar
que somos capaces de reinventar
una sociedad que privilegie y promueva la libertad
con prosperidad para todos, justicia y equidad…
donde reine la paz y la seguridad…
donde se respete la vida y la dignidad
y no se discrimine a ningún ser humano.
Sabrá Dios cuántos otoños
y cuántos millones de hojas
tendrán aún que caer
para que el hombre deje de ser
su más cruel y despiadado enemigo.
Alonso Castillo Ortiz
(Salvadoreño)
0 comments:
Post a Comment