Netorivas
Ayer, informando sobre el mediodebate de los candidatos a la vicepresidencia que tuvo lugar el domingo por la noche, escribí:
“Yo estaba (y estoy) seguro que un debate entre los candidatos a la vicepresidencia, hubiera sido mejor que el debate de los candidatos a la presidencia que está programado para el próximo domingo, bajo el patrocinio de ASDER, simplemente porque los candidatos a vice están más parejos que los candidatos a presidente, entre los que hay diferencias intelectuales y de elocuencia muy marcadas”.
“Eso me lleva a pensar que a lo mejor, conscientes de esas diferencias, dos de los tres candidatos van a tirar la toalla y no van a participar”.
Confirmando mis temores, DEM escribió en la columna Confidencial ayer:
Siguen los rumores de que los principales candidatos presidenciales no irían al debate de ASDER…dicen que van alegar que el debate podría estar inclinado a favorecer a su socio favorito… El otro problema es que los jefes de campaña no se ponen de acuerdo para el debate del TSE. Hay dos puntos que son el impasse. Uno, si habrá repreguntas entre los candidatos. Y dos, si se hablará del pasado de los candidatos. Parece que en ese tema, hay dos que no quieren que se toque nada de nada
A mí m parece que es legítimo que haya preguntas entre los candidatos; pero es natural que eso haga surgir temores porque las preguntas podrían conducir hacia la otra objeción de que se hable del pasado de los candidatos.
De ser así, el pasado de los tres candidatos debe ser un libro abierto, por mucho que los tres tengan esqueletos en sus armarios que preferirían esconder, o, por lo menos, no hablar de ellos.
O, a lo mejor, los candidatos de los dos partidos grandes le temen a la elocuencia del candidato del tercer lugar.
Pronóstico: No habrá debate presidencial. (Ojalá me equivoque, porque quienes perdemos somos los ciudadanos).
Toño González, un viejo amigo y frecuente comentarista del blog, escribió ayer:
Lo mejor sería posponer el debate para efectuarlo en la segunda vuelta, cuando tengamos únicamente dos contendientes y tengan que presentar sus programas de gobierno mejor adaptados a las necesidades del país y podrían incluso presentar su gabinete de gobierno a la consideración del respetable.
La idea de Toño tiene mérito, sin embargo, existe la posibilidad de que haya un ganador en primera vuelta y, entonces, nos quedamos sin ver el debate de los candidatos.
En todo caso, gracias, Toño.